Martes,9 de Noviembre de 2010 |
“La medida nos parece justa ya que estos medios ofrecían un producto a la ciudadanía con contenido violento, corrupto y de aceptación de conductas irregulares en jóvenes y adultos, por lo que aprobamos su salida del aire” añadió Cazorla. Por su parte, Ímber Acosta, representante de la Organización de Usuarios y Usuarias de la parroquia Petare de Caracas, denunció el silencio cómplice de la Iglesia Católica con respecto la salida del aire de las mencionadas narconovelas, tomando en cuenta que la Iglesia Católica critica constantemente los planes de seguridad del gobierno y debería pues, emitir algún juicio sobre la violencia que difunden los medios privados en las telenovelas. También criticó al canal de noticias Globovisión por las entrevistas que ha transmitido del narcotraficante Walid Makled, preso en Colombia y requerido en extradición por Venezuela. Acosta recordó que Makled esta acusado del asesinato del periodista Orel Zambrano –entre otros delitos- y ha sido mostrado por los medios como un “digno empresario”. Aseguró que “si Pablo Escobar Gaviria estuviera vivo, sería presentado de la misma manera por esa planta televisiva”. Asimismo, Israel Marín, del Frente de Usuarios y Usuarias para la Defensa de los Derechos Comunicacionales, informó que en las próximas semanas realizarán más denuncias respecto a la programación de algunos medios privados, y sobre el contenido y hora de la transmisión de las cuñas publicitarias.
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